No caen tormentas, ni hay un cielo azul encima de nuestras cabezas.
No llueve. Pero tampoco hace sol...
Pasaría desapercibida tanto con una rebequita de algún color primaveral, como con un abrigo de los que te ayudan a sobrepasar el invierno.
Es un día soso, rancio, insípido... como mi vida.
En el fondo, a mi siempre me han gustado las cosas más extremas. Las emociones fuertes.
Que nieve, o coger una insolación...
7 comentarios:
Contradicción, en la cabeza.
Y esque lo bueno es estar en los extremos, los que no lo están pasan desapercibidos.
Besos.
tengo que decirte que en cada momento lo suyo, pero que las cosas extremas nunca traen nada bueno atras...de todas formas...asi somos todos!
si me pasa...me gusta o mucho frio y arto calor
que me amen al maximo o que no me amen ♥
Saludos Te sigo !
Me gusta como acaba :)
Yo soy un puro bipolarismo. Extremista a más no poder :D encantada de conocerte :D
Yo también te sigo :)
que me beses, o me rompas el corazón...
ai por dios! como aciertas! gran blog :) un beso enorme!
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