Ni el peor de los días tiene más de veinticuatro horas.

viernes, 16 de julio de 2010


`` te quiero,  preciosa ´´

Con esa despedida a las tantas de la madrugada, cualquiera diría que lo de ellos era una historia de amor, de esas de película en las que son felices y comen perdices.

Pero no. A ella (además de su precioso culo) le gustaban sus ojos. AZULES. Y a él...
¡Quien sabe lo que le gustaba a él...!




2 comentarios:

Anónimo dijo...

a mí los ojos azules me parece muy fríos, me gustan más los grises :)

shinobu dijo...

XDDD

que entrada tan extraña y sincera pero sobre todo cierta!!!

me encanta,,